Algunas de las amenazas cibernéticas más comunes a las que se enfrenta el sector minorista incluyen los ataques de ransomware, la ingeniería social, las intrusiones en
Las pruebas de penetración, también conocidas como pruebas pen, consisten en simular un ataque cibernético para identificar las vulnerabilidades de seguridad en los sistemas de una organización. Al localizar las debilidades mediante un ataque cibernético simulado, las organizaciones pueden identificar las áreas que necesitan mejoras antes de que los cibercriminales puedan aprovecharlas. Las pruebas de penetración ayudan a las organizaciones a abordar las incidencias en sus sistemas y prevenir así los accesos no autorizados, cumplir con los requisitos de cumplimiento normativo y minimizar el riesgo de ataques de phishing.
Siga leyendo para descubrir cómo funcionan las pruebas de penetración, sus diferentes tipos y los diversos métodos de pruebas de penetración que su organización puede utilizar para proteger sus datos.
Cómo funcionan las pruebas de penetración
Una prueba de penetración consta de cinco etapas: preparación, reconocimiento, penetración, informe y corrección. Para comenzar una prueba de penetración, su organización debe determinar qué es lo que necesita ser puesto a prueba, los objetivos de la prueba y a qué hackers de sombrero blanco contratará para llevarla a cabo. A continuación, los hackers de sombrero blanco estudiarán el sistema de seguridad de su organización y buscarán vulnerabilidades. Si encuentran alguna, intentarán penetrar en la red de su organización, imitando lo que haría un cibercriminal que quisiera conseguir acceder sin autorización. Una vez completada la etapa de penetración, los hackers de sombrero blanco informarán de sus hallazgos, incluidas las vulnerabilidades que hayan encontrado en los datos a los que hayan podido acceder. El paso final consiste en restaurar sus sistemas a su estado original, para que su organización pueda parchear las vulnerabilidades y realizar actualizaciones con el fin de proteger sus datos.
Tipos de pruebas de penetración
Los principales tipos de pruebas de penetración son las pruebas de penetración de redes, aplicaciones web, redes inalámbricas y de ingeniería social.
Prueba de penetración de redes
Una prueba de penetración de redes evalúa el grado de seguridad de una red frente a un ataque cibernético simulado, en busca de vulnerabilidades de seguridad que los cibercriminales podrían aprovechar. Al realizar una prueba de penetración de red, su organización puede identificar las debilidades que podrían explotarse para vulnerar su red. Estas pruebas de penetración pueden ayudar a prevenir violaciones de datos, que de lo contrario podrían derivar en pérdidas financieras y daños a la reputación de su organización.
Prueba de penetración de aplicaciones web
Una prueba de penetración de aplicaciones web es una prueba de seguridad que simula un ataque cibernético en una aplicación web. El objetivo es identificar las debilidades dentro de la aplicación web para garantizar que los datos sensibles permanezcan protegidos. Dado que las aplicaciones web a menudo tienen acceso a información privada, es importante realizar pruebas de penetración en las aplicaciones web para asegurarse de que los datos estén protegidos en caso de ataque cibernético.
Prueba de penetración de redes inalámbricas
Una prueba de penetración de red inalámbrica evalúa la seguridad de una red inalámbrica y la seguridad de las conexiones con los dispositivos, mediante la simulación de un ataque cibernético. Esto incluye computadoras, celulares o cualquier dispositivo de Internet de las cosas (IoT) que se conecte a la red inalámbrica de su organización. Al realizar una prueba de penetración de red inalámbrica, podrá proteger mejor estos dispositivos contra futuros ataques cibernéticos.
Prueba de penetración de ingeniería social
Una prueba de penetración de ingeniería social evalúa cómo responden los empleados de una organización a un ataque cibernético simulado. Su organización puede realizar una prueba de penetración de ingeniería social mediante el lanzamiento de un ataque simulado de phishing, smishing o vishing. En función de la intuición y reacciones de los empleados, puede identificar las áreas de mejora y capacitar a los empleados en materia de concienciación de seguridad para evitar que los cibercriminales obtengan acceso no autorizado por un error humano.
Métodos de las pruebas de penetración
Además de que existen varios tipos de pruebas de penetración, estas también pueden realizarse de diversas maneras, incluidas las pruebas externas, internas, a ciegas, de doble ciego y dirigidas.
Pruebas externas
Las pruebas de penetración externas implican realizar un ataque cibernético simulado desde fuera de su organización. El objetivo es identificar los posibles puntos de entrada, o vectores de ataque, que los cibercriminales podrían utilizar para obtener acceso no autorizado.
Pruebas internas
Las pruebas de penetración interna simulan una situación en la que el cibercriminal dispone de acceso interno a los sistemas de su organización. El objetivo es determinar cuánto daño podría causar una amenaza interna. Por ejemplo, cabe la posibilidad de que alguien de su organización utilice una contraseña no segura de forma negligente, o de que alguien intente sabotear su organización desde dentro. Las pruebas internas identifican las vulnerabilidades de seguridad existentes, especialmente las relacionadas con personas que cuentan con acceso interno.
Pruebas a ciegas
Cuando su organización sabe que se va a producir un ataque cibernético simulado, esto se conoce como prueba a ciegas. Si bien su organización puede prepararse para esta prueba de penetración, el hacker de sombrero blanco no está al tanto, y solo dispone de información limitada o de información pública acerca de la empresa. Las pruebas a ciegas ayudan a su organización a obtener resultados realistas sobre los datos a los que podría acceder un cibercriminal en caso de que se produjera un ataque cibernético real.
Pruebas de doble ciego
Las pruebas de doble ciego se producen cuando ni su organización ni el hacker de sombrero blanco saben que se está produciendo un ataque cibernético simulado ni tienen información al respecto. Este tipo de pruebas simula un ataque cibernético real en ambas partes, ya que nadie puede prepararse de antemano, puesto que se produce de forma aleatoria.
Pruebas dirigidas
Para evaluar la seguridad de un área u objetivo específico dentro de su organización, debería realizar una prueba de penetración mediante pruebas dirigidas. Esto simula un ataque cibernético para identificar las vulnerabilidades de seguridad dentro de una parte determinada de los sistemas de su organización. Por ejemplo, si desea asegurarse de que la parte del sistema de su organización que contiene datos sensibles esté segura, realice una prueba específica para determinar las vulnerabilidades de seguridad en esa área.
¿Qué sucede una vez realizada una prueba de penetración?
Una vez se haya completado con éxito una prueba de penetración, comienza el verdadero trabajo. El primer paso que debería dar su organización es revisar los resultados y hallazgos del hacker de sombrero blanco. Compruebe las vulnerabilidades de seguridad localizadas, así como los puntos de entrada aprovechados durante la prueba de penetración, para determinar por dónde empezar a la hora de desarrollar un plan de remediación. En función de los hallazgos, cree un plan para priorizar los parches de las diversas vulnerabilidades de seguridad. Es posible que también desee realizar una prueba de penetración de seguimiento para asegurarse de que los sistemas actualizados ya no sean vulnerables a los ataques cibernéticos simulados.
Proteja a su organización mediante pruebas de penetración
Su organización puede obtener un gran beneficio de realizar pruebas de penetración, ya que mejoran la seguridad al identificar las debilidades que los cibercriminales podrían explotar en un entorno simulado y controlado. Es esencial realizar pruebas de penetración con regularidad para mantener sus sistemas lo más seguros posible y evitar que los cibercriminales obtengan acceso no autorizado a sus datos, dispositivos o red.